Ubicado en un importante eje comercial y de oficinas, Buna Café es un espacio en el que poder disfrutar de un café de especialidad en un ambiente moderno y confortable.
Se trata de un espacio de reducidad dimensiones con formas sencillas y limpias, pero con gran importancia en los detalles, reforzando la pasión con que se prepara este café de especialidad y la cercanía que se quiere mostrar al cliente.
Lo que las diseñadoras buscaban transmitir en este espacio es la limpieza y pureza con la que se prepara un café, como si de un laboratorio se tratase. Pero sin dejar de lado el confort y la calidez, cuidando cada detalle para que el cliente disfrute del mismo. Un espacio en el que todo está en armonía y equilibrio, donde no hay competencia entre diseño y producto, donde el aroma del café forma parte de un espacio creado por y para el disfrute del mismo.
Tomando como base la importancia que tiene para Buna el impacto medioambiental, para la construcción del espacio se ha buscado utilizar en su mayoría materiales de proximidad, reciclados y orgánicos, como es el valchromat (viruta de madera reciclada con tintes orgánicos) o el mosaico y baldosas, fabricados a escasos kilómetros de la ciudad. Se ha diseñado la zona de preparación como una barra rectangular a una sola altura, donde el cliente puede ver todo el proceso mientras, como manda la tradición portuguesa, disfruta de su café en la misma barra. Para los que quieren disfrutar de su café con más tranquilidad, se ha diseñado un banco enmarcado en la ventana sacando provecho de la morfología del local y se ha creado un rincón donde el confort es lo principal. La vegetación natural también juega un papel importante en este espacio. Se han ubicado jardineras con autorriego en la ventana y en el interior, así como en los baños, lo que hace el espacio todavía más vivo.